Efectivamente, muchos estudios colocan en los últimos años a Ottawa como una de las mejores ciudades del mundo para vivir. Siempre habíamos soñado con viajar alguna vez a Canadá. Lo que no sabíamos es que íbamos a tener la oportunidad de vivir en Ottawa un año entero. Un año vivido muy intensamente y durante el cual no pudimos integrar como un otouense más en la vida de esta maravillosa ciudad y capital de Canadá.
Ottawa es una ciudad relativamente pequeña si la comparamos con otras capitales de grandes países. Sólo tiene unos 900.000 habitantes y eso si se cuentan todos los pueblos pequeños del área metropolitana. El hecho de ser la capital de Canadá supone una serie de ventajas extraordinarias. Por ejemplo los mejores museos del país están en Ottawa y el bilingüismo del que tanto presumen los canadienses toma forma verdadera en la capital, una de las pocas ciudades de Canadá que se puede considerar totalmente bilingüe. Absolutamente todo está escrito en ambos idiomas y eso para alguien amante de las lenguas es toda una felicidad constante. Además, Ottawa está estratégicamente situada en la frontera con la provincia tradicionalmente francófona, Quebec, y eso significa que sólo cruzando un puente ya estás en Quebec y en un entorno mayoritariamente francófono, con leyes y regulaciones diferente y con precios normalmente más baratos ;) .
La zona más visitada de Ottawa es sin duda Parliament Hill donde encontramos los edifivios del Parlamento y unas zonas ajardinadas con vistas impresionantes al río Ottawa.
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Sede central del Parlamento |
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Vista del Parlamento desde el río Ottawa |
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VIsta de la Catedral de Ottawa desde Parliament Hill |
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Monumento a la guerra, donde tuvo lugar el atentado contra uno de los soldados que custodian el lugar |
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Muy cerca del Parlamento se conmemora la confederación con banderas e insignias de todas las provincias que ahora la forman |
Una de las razones por las que Ottawa tiene esta calidad de vida es por la presencia de incontables parques urbanos y de su famoso Sendero de la Capital, un sendero que rodea toda la ciudad y que te permite ir a casi cualquier sitio en bicicleta o andando por un sendero natural rodeado de arboles.
Este es el mapa del sendero que rodea la ciudad
Uno de los lugares más señeros de Ottawa es sin duda el Canal Rideau. El canal Rideau es una de las más grandes obras de ingeniería y fue declarado patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2007. Es un canal navegable, actualmente sobre todo para e turismo. En invierno el canal se congela hasta siete metros de profundidad, impidiendo la navegación y con el huelo, el canal se convierte en una inmensa pista de hielo, la mayor del mundo. Los otouenses disfrutan desde marzo de esta inmensa pista de patinaje.
Vista del parlamento desde atrás en la orilla del río Ottawa
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El carril bici del sendero de la capital es magnífico y te lleva por sitios muy bonitos
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No muy lejos del Parlamento se encuentra Rideau Hall Park. Rideau Hall es un parque urbano donde se ubica la residencia del gobernador General (representante de la Jefa del estado que es la Reina Isabel II). Rideau Hall es una parte muy especial de la red del Sendero Transcanadiense y es un parque hermoso donde disfrutar en cualquier época del año.
Todos los otouenses pueden disfrutar de este bello parque en todas las estaciones del año. Tiene estatuas y hasta un totem precioso en sus jardines.
En otoño es una gozada pasear por Rideau Hall al atardecer mientras te caen constantemente las hojas.
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Canal Rideau |
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El Canal Rideau es patrimonio de la Humanidad |
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Cataratas Rideau en la desembocadura del Río Rideau, en el río Ottawa |
Por motivos de cercanía a mi trabajo estuvimos viviendo en una zona privilegiada de Ottawa, a escasos metros de la residencia del Governador General de Canadá, a diez minutos andando de la residencia del Primer ministro canadiense y rodeados de la gran mayoría de residencias de embajadores y demás personal diplomático.
Por tanto era un barrio especialmente multicultural con casas preciosas y mucha actividad vecinal. Los vecinos eran los más acogedores que jamás hemos tenido. Los canadienses son gente abierta y hospitalaria ya que son por naturaleza un país multicultural acostumbrado a recibir continuamente emigrantes, necesarios para el desarrollo del país.
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Las ardillas son las reinas de estos vecindarios |
En Rockcliffe Park hay un magnífico mirador desde el que se divisa la orilla de quebec y cómo el río Gatineau desemboca en el río Ottawa
Lo primero que hicimos fue buscar un colegio público para los niños, y precisamente el del barrio era el colegio al que habían ido los hijos del primer ministro. En Canadá todas las personalidades públicas llevan a sus hijos a colegios públicos porque ciertamente es la manera de defender la calidad de los servicios públicos. Papá y mamá se apuntaron a clases de idiomas inmediatamente. Papá a clases de inglés y mamá a clases de francés para mejorar nuestros niveles en cada idioma.
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Este era el parque donde salían al recreo del colegio que se ve al fondo :) |
El clima tan extremo que tiene Canadá se refleja perfectamente en su capital, donde tuvimos un invierno de 2014-2015 muy duro y largo con temperaturas que llegaron a -40 grados de sensación térmica y en el verano rozamos los 40 grados pero en positivo de calor. Puedes ver cómo afectan las estaciones a estos paisajes en la entrada Lo que hace el tiempo. Parece increíble imaginar que es posible semejante oscilación de temperaturas, prácticamente entre 70 y 80 grados de oscilación a lo largo de las estaciones.
No obstante los canadienses se han adaptado muy bien a este clima y disfrutan del entorno durante todo el año. Nosotros nos planteamos desde el primer día intentar hacer todo lo que hacían los canadienses y así vivir integrados pro completo en el país y la cultura. Y así lo hicimos y lo conseguimos.
No te pierdas la entrada Ottawa en Invierno donde verás otra Ottawa muy distinta pero sin duda espectacular y con un colorido totalmente distinto
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